El domingo de Ramos,
que hoy celebramos, nos introduce de lleno en Semana Santa, en la
que recordamos y actualizamos los misterios de nuestra salvación.
Semana Santa, porque celebramos los hechos más sagrados en los que
más se manifiesta la santidad de Dios. Es una fuerte interpelación a
dejarnos santificar.
¿Cómo vamos a celebrar la Semana Santa No basta con los actos
tradicionales más o menos piadosos. Hay que meditar los misterios de
Cristo; hay que actualizar su Pasión y su Resurrección, haciéndote
presente hoy, acercándote a todos los que sufren y los que esperan.
No basta con ser espectador. Tenemos que celebrarla y vivirla.
Por tal motivo, invito a participar en el RETIRO DEL VIERNES SANTO,
10 DE ABRIL, a todos los integrantes y amigos de la familia marista,
a ustedes estimados lectores. El tema del retiro será el siguiente:
"CRISTO CRUCIFICADO, FUERZA Y SABIDURÍA DE DIOS (1 Cor 1,24).
Se realizará en el Instituto San Martín, desde las 9,00 hasta las
13,00 hrs. La entrada será por avenida San Martín y deben traer lo
siguiente: mucho entusiasmo, deseos de participar y compartir, la
Biblia o el Nuevo Testamento y un lápiz.
Espero poder vivir y compartir con ustedes esta hermosa experiencia
de Dios.
En esta Semana Santa, el Señor quiere introducirnos en lo más íntimo
de su morada, en la bodega interior, en la que guarda los mejores
vinos. Esa bodega interior no es otra cosa que su corazón. En él
encontramos las fuentes inagotables de la gracia y la
misericordia. Allí, el venero de aguas limpias y
purificadoras que mana sin cesar. Allí, vinos de distintas
marcas, todos excelentes.
El
vino con etiqueta de alegría, vino blanco, muy suave y
espumoso: es un quita-penas radical, produce una alegría
inexplicable y duradera que se contagia sin querer.
El
vino con etiqueta de dolor, rojo intenso, parecido a la
sangre; posee una gran fuerza y es muy apropiado para el
testimonio y el martirio; un vino que enamora de la cruz.
El
vino con etiqueta de amor, un tinto de alta graduación, con
efectos rápidos que te saca de ti mismo, te coloca en éxtasis
verdadero; ya no vive en ti y para ti; vives fuera de ti y para
los demás.
El
vino con etiqueta del Espíritu, es el más subido y
concentrado; es a la vez dulce y fuerte, gozoso y compasivo,
ardoroso y pacífico
Sí, éste es un vino que concentra y recoge
las esencias de los demás, que los contiene a todos y está en
todos: es la joya de la bodega.
Estimados lectores: penetren en la bodega de
Cristo y embriáguense con sus mejores vinos. Embriáguense de su
Espíritu Santo que los capacite para la entrega; que asuman su
pasión prolongada; que les identifique con él.
En esta Semana traten de vivir los misterios de la Redención.
Oren y contemplen la Cruz de Cristo levantada sobre cada pobre,
grabada sobre cada enfermo, entrañada por cada testigo y mártir.
Recuerden: EL VIERNES SANTO, JESÚS LES ESPERA
vengan al RETIRO
ESPIRITUAL a encontrase con JESÚS CRUCIFICADO.